El fracaso a veces es una suerte de guardián del éxito; no obstante, fracaso es una de las palabras más horribles de la lengua española, junto con engaño y perecer.
El fracaso a veces es una suerte de guardián del éxito; no obstante, fracaso es una de las palabras más horribles de la lengua española, junto con engaño y perecer.