sábado, 17 de julio de 2004

Una cuenta pendiente

Vivís en un ¨taper¨ me dijo, solo lo mire y me reí. Tome un trago largo de café, mordí el chocolate y lo volví a mirar. Mientras percibía como estrujaba el paquete de cigarrillos con sus dedos, decidí pacificar sus nervios y le dije:
-Si supieras la cantidad de cosas que pasan por mi cabeza en este momento... Si al menos me interesase decirte o incluso reclamarte un décimo de las cosas que pienso y siento, quizás entenderías un poco más. Pero no me interesa, creo que ya nada de esto vale la pena.
Trató de decir algo inteligente. Esperé a que se resignara y me levanté de la mesa con una mueca algo desafiante en mi cara -pero llena de dolor- y le dije:
-lo que vos llamas ¨taper¨, yo lo llamo soledad. Y me marche.